El dólar volverá a ser un termómetro en estas horas.
Y la temperatura que marque dependerá de lo que ocurra en tres dimensiones en disputa entre un oficialismo que viene de varios traspiés, pero que domina la escena, y una oposición aún inorgánica, pero en proceso de rearme.
Esos tres puntos de choque son la calle, el Congreso y el mercado..